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Dirección: Veracruz, Mexico

Desde que entró en operación en octubre de 2014, el centro comercial Andamar Lifestyle Center tuvo problemas para contener los fuertes vientos de Veracruz, que constantemente dejaban abiertas las puertas batientes y dejaban expuestas las instalaciones al calor, la humedad y la brisa marina. Esto, a su vez, permitía que el aire acondicionado del centro comercial escapara, lo que generaba un segundo desafío: mayores gastos de electricidad.

El Andamar Lifestyle Center alberga más de diferentes 100 tiendas distribuidas en casi 2 millones de pies cuadrados de espacio dedicado a ventas al por menor, restaurantes y entretenimiento. Teniendo en cuenta los 5.3 millones de visitantes que recibe anualmente el centro comercial, y el hecho de que 40% de ellos ingresa por la entrada principal, la situación de la filtración y pérdida de aire se hizo insostenible. En consecuencia, Rosa María Bueno, directora de Andamar, comenzó a buscar soluciones.

"Al principio, tratamos de encontrar una manera de resolver el problema sin deshacernos de las puertas manuales que ya estaban instaladas. Entonces, teníamos casi que un guardia en cada puerta para que se asegurara de que las puertas estuvieran cerradas o para que las mantuviera cerradas cuando el viento las estaba empujando. La realidad es que no íbamos a resolver el problema de esa manera," explicó Bueno.

Dos factores importantes que el centro necesitaba tener en cuenta eran la ubicación y el uso de cada puerta. Además de las entradas principales para visitantes, Andamar tiene entradas a sus terrazas y a los miradores con vista al mar, que son utilizadas, generalmente, por los meseros que entran y salen, lo que hacía fundamental que el acceso fuera fácil. “Debido a que estamos al lado del océano, muchas personas salen a disfrutar del aire, tomar fotos y comer; por lo tanto, los meseros entran y salen con las manos llenas de comida, enormes bandejas, etc. Teníamos que buscar la entrada correcta que no complicara este proceso", afirmó Bueno.

Andamar también tenía que tomar en consideración las opiniones de los arquitectos que diseñaron el centro comercial. "A los arquitectos les preocupaba mucho que las nuevas puertas modificaran visualmente el diseño y obstruyeran las vistas hacia el mar, dos aspectos importantes que se cuidaron mucho desde el principio. Después de una exhaustiva búsqueda, encontramos la solución ideal con Boon Edam", explicó la directora.

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En total, en el centro comercial se instalaron ocho puertas de Boon Edam: tres puertas giratorias automáticas Crystal TQ, tres puertas giratorias manuales Crystal TQ y dos puertas giratorias semiautomáticas Crystal BoonAssist. Con la ayuda de AVANCE Inteligente, una compañía local de instalación de puertas, cada una de las puertas se instaló teniendo en cuenta el propósito específico y la ubicación de la entrada.

Según indicó la directora Bueno, además de recibir un análisis personalizado, el centro comercial contó con un acompañamiento y una dedicación permanentes por parte del personal de soporte de Boon Edam durante la ejecución del proyecto. Esto permitió implementar las soluciones adecuadas y dio al cliente plena confianza en la calidad y adaptabilidad de los equipos de Boon Edam.

“Estamos muy contentos con la solución en todos los aspectos. Cumple con su propósito funcional y estético, contribuye a proyectar una imagen positiva de Andamar, y las puertas han permitido el flujo de visitantes a un buen ritmo”, concluyó Bueno.

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